Mercado de muertos // Huamantla
Era un domingo más en la vida de Ana, sus planes eran salir
a “arreglarse” el cabello, regresar a casa y quizás ver Netflix al terminar un
proyecto del trabajo; solo que cuando salió no se imaginó toparse con el mejor
escenario de la época.
El mercado de muertos.
¿Qué más podía hacer? Acompañada de Matilda (mi calavera)
recorrimos lo largo de la calle en busca de que retratar. Aromas venían y se
mezclaban; texturas y colores por todos lados; y lo mejor de todo era la
calidez y las sonrisas de los comerciantes (hasta me preguntaban en que periódico
trabajaba, ja, ja, ja).
Una vez más no sentí el tiempo solo disfruté el caminar
oliendo a pan, a incienso, cempasúchil, y gran variedad de frutas; veía los
disfraces, accesorios, colores y mil formas en el papel picado; Sentía la alegría
de las personas que iban y compraban y no pude evitarlo, me uní a ellos y
empecé las compras para armar mi pequeño altar de muertos.
Lo he dicho miles de veces la época de muertos es la temporada
que más me emociona en el año (superando la navidad y mi cumpleaños). Y si se
preguntan qué es lo que más me gusta la respuesta es que a la gente le gusta sonreír aun tratándose de la muerte.
¿a ti que es lo qué más te gusta? No olvides revisar las etiquetas para contenido relacionado.
Tardes Ana.
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